SEUL.- La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, reafirmó este jueves desde Seúl el compromiso de su país con la desnuclearización de Corea del Norte y expresó su preocupación por su desarrollo armamentístico.
Pelosi se reunió hoy con su homólogo surcoreano, Kim Jin-pyo, con quien acordó seguir apoyando «los esfuerzos de los dos gobiernos para la desnuclearización y la paz a través de la cooperación internacional y los diálogos diplomáticos», sustentados sobre «una disuasión poderosa y extendida» ante Pionyang, indicaron en un comunicado conjunto recogido por la agencia de noticias Yonhap.
La presidenta del Congreso estadounidense y su par surcoreano también «expresaron preocupación por la grave situación, en la que el nivel de amenaza de Corea del Norte está aumentando», en alusión a las numerosas pruebas de misiles realizadas este año por Pionyang y los persistentes rumores sobre un próximo test nuclear del país.
Pelosi y Kim destacaron la expansión de los lazos entre sus países, que ha venido ampliándose no sólo en materia de seguridad, sino también económica y tecnológica, entre otros ámbitos.
Amos políticos acordaron también revisar una resolución que marca el 70 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre los dos países con el objetivo de fortalecer su vínculo.
«Una relación que comenzó de la urgencia y por cuestiones de seguridad hace muchos años se ha convertido en la más cálida de las amistades», dijo Pelosi en una rueda de prensa junto al portavoz Kim, refiriéndose a los lazos bilaterales desde el apoyo de EE.UU. al Sur durante la Guerra de Corea (1950-53), conexión que calificó de «muy especial» para Washington.
Pelosi llegó a la base aérea de Osan, al sur de Seúl, la noche del miércoles procedente de Taipéi, donde realizó una visita relámpago y sin anunciar oficialmente que desató fuertes críticas de China, movilizando militar y represalias contra la isla, y que también fue duramente criticada por Pionyang por su «injerencia».
La política estadounidense, la primera portavoz del Congreso de EE.UU. que visita el país asiático desde 2002, tiene previsto desplazarse hoy hasta la aldea de Panmunjom, fronteriza con Corea del Norte, donde se encuentra el área de seguridad conjunta (JSA), la zona más militarizada de la península.
Pelosi se convertirá así en el cargo público estadounidense de mayor rango en visitar la zona, patrullada conjuntamente por Seúl y el Comando de la ONU, desde la visita del expresidente Donald Trump en 2019, que se encontró allí con el líder norcoreano, Kim Jong-un.
Las negociaciones sobre desnuclearización entre Pionyang, Seúl y Washington están en punto muerto desde la fallida cumbre de Hanói de ese mismo año entre Trump y Kim, que no llegaron a un acuerdo sobre las concesiones del Norte y el levantamiento de sanciones impuestas al régimen por sus programas de desarrollo de misiles y atómico.
