El presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo el jueves que el “deporte no debería politizarse”, días después de anunciar, entre críticas, que asistirá al Mundial de Qatar si Les Bleus alcanzan las semifinales.
En declaraciones desde Bangkok, Macron apuntó que las cuestiones relacionadas con los derechos humanos y el medio ambiente en Qatar eran “preguntas que hay que hacerse cuando se adjudica el evento”.
La FIFA eligió a Qatar como anfitriona del Mundial de este año en una votación realizada en 2010.
El torneo de selecciones más importante del mundo ha despertado múltiples polémicas, desde las condiciones de vida de los trabajadores migrantes al impacto de los estadios con aire acondicionado en el medio ambiente y el lugar que ocupan las personas LGBTQ, las mujeres y las minorías.
El primer Mundial que se celebra en un país árabe echa a andar el domingo.
A principios de semana, el palacio del Elíseo indicó que Macron viajará a Qatar si la selección llega a semifinales y precisó que el mandatario “les escribió un mensaje” en este sentido.
El mes pasado, la ciudad de París anunció que no emitirá los partidos de la Copa del Mundo en pantallas gigantes en zonas públicas para los aficionados ante la preocupación por el registro de derechos humanos del país.
A pesar de que Francia es la campeona defensora, otras ciudades del país adoptaron la misma medida.
