Las fuerzas de seguridad chinas arrestaron recientemente a un exfuncionario de una empresa tabacalera de propiedad estatal sospechoso de corrupción que llevaba huido 26 años, informó en las últimas horas la Comisión Nacional de Supervisión, el principal brazo anticorrupción del Estado chino.
El sospechoso, Wang Hanming, era un gerente de ventas de una empresa de cigarrillos de la provincia meridional de Yunnan, una de las principales productoras de hoja de tabaco del país.
En 1996, «huyó para escapar de un castigo», según un comunicado publicado en la cuenta oficial del organismo anticorrupción, que no proporcionó más datos sobre la naturaleza de los delitos supuestamente cometidos por el exfuncionario.
Tres años más tarde, China pidió a Interpol que emitiera una «notificación roja» en contra de Wang.
Recientemente, las fuerzas de seguridad encontraron «pistas importantes» que señalaban que el fugitivo se hallaba en China viviendo bajo un pseudónimo, tras lo cual fue arrestado en la ciudad de Chengdu (centro), indicó la Comisión.
La Oficina de Repatriación de Fugitivos de la provincia de Yunnan declaró a medios locales que mantiene «una actitud de cero tolerancia contra la corrupción» y que «trabajará para perseguir a todos los sospechosos huidos».
